La chatarra metálica hace referencia a ese conjunto de trozos de desecho de metal, en la mayoría de los casos de hierro, que pierde su vida útil y realmente se nos convierte en un estorbo. Este tipo de agrupamiento de materiales de metal puede ser tratado y reciclado para conseguir otros metales de utilidad, sobre todo en el mundo de la construcción.
El procedimiento para reciclar este material es importante para conservar el medio ambiente y así disminuir la contaminación que genera el metal, tanto en el aire como en la tierra. Así surge la figura del chatarrero, esa persona que se dedica de forma profesional a este negocio que trata de almacenar y vender los desechos metálicos.
El valor de la chatarra
El contexto internacional
Para poder calcular cuánto vale la chatarra tenemos que tener en cuenta el peso. Aunque los precios se suelen mantener pueden variar cuando existe escasez en el mercado internacional.
La falta de rentabilidad
La falta de rentabilidad tiene lugar cuando hay un estancamiento en el mercado que termina a la baja por la falta de actividad de los agentes que operan en el sector.
Caída en los precios
En Asia se produce la mayor parte de la materia prima que se utiliza en metales de chatarra. Si un país que produce entra en crisis, también caen los precios en el resto.
Por su parte, el punto limpio punto verde es una instalación municipal que se encarga de la recogida selectiva de residuos que no son habituales en la recogida domiciliaria. Normalmente, este servicio es gratuito para el particular y tiene coste para las empresas. Aunque el propósito final es similar, existen diferencias.
La empresa privada o el chatarrero nos compra y paga los productos mientras que el organismo público no lo hace.
Aunque cada negocio particular es un mundo, siempre se busca la transparencia y fiabilidad en el servicio.